viernes, 31 de enero de 2020

La Terapia de la Dignidad


Una Puerta a la Esperanza

El contexto socio-cultural actual está progresivamente erosionando la conciencia respecto a aquello que hace preciosa la vida humana. Vida humana que, con frecuencia, es evaluada en función de su eficiencia y utilidad, hasta el punto de considerar ‘vidas descartadas’ o ‘vidas indignas’ aquellas que no responden a tales criterios.

blog,ameliacarro,institutocorvilud,cardiologiadeportiva,cardiologogijon,cardiologooviedo,cardiologoasturias,resiliencia,cuidadospaliativos,yoga,mindfulness,papafrancisco,enfermedadterminal,hospicios,agonia,medicinaamable,humanizacion,medicina,holistica,hipocratica,enfermedadescronicas,muertedigna


Una sociedad merece la calificación de ‘civil’ si desarrolla anticuerpos contra la cultura del descarte; si reconoce el valor intangible de la vida humana; si la solidaridad es practicada de forma efectiva y salvaguardada como fundamento de la convivencia.

Si ahondamos en el tema del cuidado de los enfermos en su fase crítica y terminal de la vida, conviene reescribir la ‘gramática’ del hacerse cargo y asumir el cuidado de la persona que sufre. Sin la compasión, quien mira no se implica en aquello que observa, y pasa de largo; en cambio, quien tiene un corazón compasivo se implica, se detiene y se preocupa.

blog,ameliacarro,institutocorvilud,cardiologiadeportiva,cardiologogijon,cardiologooviedo,cardiologoasturias,resiliencia,cuidadospaliativos,yoga,mindfulness,papafrancisco,enfermedadterminal,hospicios,agonia,medicinaamable,humanizacion,medicina,holistica,hipocratica,enfermedadescronicas,muertedigna


Alrededor del enfermo debe crearse una plataforma humana de relaciones que, además de favorecer el cuidado médico, abra la puerta a la esperanza, especialmente en aquellas situaciones-límite en las que el mal físico se acompaña de desaliento emotivo y angustia espiritual.

La cercanía relacional, y no meramente clínica, con el enfermo, considerado en la unicidad y en la integridad de su persona, impone el deber de no abandonar nunca a nadie ante la presencia de males incurables. La vida humana, debido a su destino eterno, conserva todo su valor y toda su dignidad en cualquier condición, también en la precariedad y en la fragilidad, y, como tal, siempre es digna de la máxima consideración.

En la búsqueda de esos objetivos es necesario diferenciar la función de los hospitales de pacientes agudos de la labor de los conocidos como “hospices”, hospitales especializados en cuidados paliativos, donde los enfermos terminales son acompañados con un cualificado apoyo físico, mental y espiritual, para que puedan vivir con dignidad, confortados por la cercanía de sus seres queridos, la fase final de sus vidas terrenales.

Tales centros constituyen lugares en los que se practica con esfuerzo la terapia de la dignidad, alimentando así el amor y el respeto por la vida.

blog,ameliacarro,institutocorvilud,cardiologiadeportiva,cardiologogijon,cardiologooviedo,cardiologoasturias,resiliencia,cuidadospaliativos,yoga,mindfulness,papafrancisco,enfermedadterminal,hospicios,agonia,medicinaamable,humanizacion,medicina,holistica,hipocratica,enfermedadescronicas,muertedigna

Fuente: ACIprensa
30 de Enero 2020
Enlace URL ACIprensa


No hay comentarios:

Publicar un comentario